• Rub‚n Dario

    From Capy@TEMP to ** ALL ** on Fri Feb 14 19:00:00 1997
    Ac  va uno de los poemas m s conocidos de Rub‚n Dar¡o..

    Juventud, divino tesoro,
    ­ya te vas para no volver!
    Cuando quiero llorar, no lloro
    y a veces lloro sin querer.

    Plural ha sido la celeste
    historia de mi coraz¢n.
    Era una dulce ni¤a, en este
    mundo de duelo y aflicci¢n.

    Miraba como el alba pura;
    sonre¡a como una flor.
    Era su cabellera oscura
    hecha de noche y de dolor.

    Yo era t¡mido como un ni¤o.
    Ella, naturalmente, fu‚,
    para mi amor hecho de armi¤o,
    Herod¡as y Salom‚...

    Juventud, divino tesoro,
    ­ya te vas para no volver...!
    Cuando quiero llorar, no lloro,
    y a veces lloro sin querer...

    La otra fu‚ m s sensitiva,
    y m s consoladora y m s
    halagadora y expresiva,
    cual no pens‚ encontrar jam s.

    Pues a su continua ternura
    una pasi¢n violenta un¡a.
    En un peplo de gasa pura
    una bacante se envolv¡a...

    En sus brazos tom¢ mi ensue¤o
    y lo arrull¢ como un beb‚...
    Y lo mat¢, triste y peque¤o,
    falto de luz, falto de fe...

    Juventud, divino tesoro,
    ­te fuiste para no volver!
    Cuando quiero llorar, no lloro,
    y a veces lloro sin querer....

    Otra juzg¢ que era mi boca
    el estuche de su pasi¢n
    y que me roer¡a, loca
    con sus dientes el coraz¢n,

    poniendo en un amor de exceso
    la mira de su voluntad
    mientras eran abraso y beso
    s¡ntesis de la eternidad;

    y de nuestra carne ligera
    imaginar siempre un Ed‚n,
    sin pensar que la Primavera
    y la carne acababan tambi‚n...

    Juventud, divino tesoro,
    ­ya te vas para no volver!
    Cuando quiero llorar, no lloro,
    ­y a veces lloro sin querer!

    ­Y las dem s!, en tantos climas,
    en tantas tierras siempre son,
    si no pretextos de mis rimas,
    fantasmas de mi coraz¢n.

    En vano busqu‚ a la princesa
    que estaba triste de esperar.
    La vida es dura.Amarga y pesa.
    ­Ya no hay princesa que cantar!

    Mas a pesar del tiempo terco,
    mi sed de amor no tiene fin;
    con el cabello gris me acerco
    a los rosales del jardin...

    Juventud, divino tesoro,
    ­ya te vas para no volver!...
    Cuando quiero llorar, no lloro,
    y a veces lloro sin querer...

    ­Mas es mia el Alba de oro!

    Bueno...espero que les haya gustado...para la pr¢xima les paso otra..

    Capy



    ___ Blue Wave/386 v2.30 [NR]